Ciudad Victoria, 6 Feb (Agencias).-

Especialistas de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) estudian la presencia de nuevas especies de parásitos en los peces de Tamaulipas, analizando los especímenes a nivel molecular.

La investigadora del Instituto de Ecología Aplicada (IEA), Lorena Garrido Olvera, destacó que con el apoyo del Programa para el Desarrollo Profesional Docente (Prodep) llevan a cabo el proyecto «Metazoarios parásitos de los peces de Tamaulipas».

Explicó que el estudio consiste en revisar la musculatura del pez para conocer la presencia de algún parásito en estado larvario, cuya presencia se pueda encontrar en peces con un valor comestible, lo que permite identificarlos.

Garrido Olvera apuntó que como parte de estos estudios se encontraron larvas de una clase de parásitos conocida como cestodos, alojados en la musculatura de peces como corvinas, la guabina, la croca o la trucha.

“También hay un trematodo, que de hecho no es uno, sino dos especies del género clinostomum, y al parecer una de ellas se trata de una nueva especie, por lo que estamos corroborando la información molecular”, señaló.

Detalló que parte del trabajo consistió en realizar un estudio morfológico con la ayuda del microscopio estereoscópico óptico,con la finalidad de reconocer los grupos a los cuales pertenecen las especies.

“Pero muchas veces, como son larvas, no poseen las características que nos haría llevarlo o determinarlo a un nivel de especie. Entonces para eso pasamos a la siguiente fase, que fue obtener el DNA (ácido desoxirribonucleico) de cada uno de los ejemplares que fueron obtenidos en el campo”, apuntó.

Comentó que para la identificación utilizó la base de datos GIM Bank, con el fin de tener acceso a diferentes genes de diferentes especies.

“Es básicamente lo que hicimos, y ese es el resultado, que ya tenemos la identificación a nivel especie con ayuda de la información molecular”, señaló.

“Yo creo que nada más va a ser una nueva especie, pero lo importante de aquí es que, no nada más se trata de identificarlos, sino saber qué tanto se conoce en el país o si ha sido registrado”, apuntó.

“Y de eso pues tenemos varios nuevos registros, pero al parecer una de las especies de clinostomum, no se ha descrito en el mundo, que fue la que encontramos un clinostomum de guabina”, explicó.

La investigadora detalló que aún falta la otra parte por realizar, que consiste en un estudio morfométrico “y someterla para que se reconozca como una nueva especie”.

Manifestó que este hallazgo es importante, porque eso es básicamente lo que se hace al explorar la diversidad biológica de la cual pareciera que ya se conoce todo.

“Pero si nosotros le escarbamos vemos que muchas veces han estado ahí los ejemplares, pero nadie los ha descrito, nadie se ha detenido a detallarlos. Y eso es lo que falta, trabajo taxonómico para poder describir a todas las especies”, dijo.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí