Lo del sábado en Querétaro no fue una riña por futbol, fue un «acto de criminales». Así textualmente lo definió Mikel Arriola, presidente de la Liga MX, en entrevista con Mediotiempo en el día posterior a los actos violentos en el Estadio Corregidora, donde seguidores de Gallos Blancos y Atlas protagonizaron uno de los días más oscuros de nuestro futbol.
En toda esa reyerta, uno de los principales cuestionamientos fue la falta de elementos policiacos, a lo que el propio jerarca del balompié reveló que por estipulaciones estatales en los que la Liga MX no puede interceder, se ha prohibido la presencia de seguridad pública en estos eventos privados.
«Lo que tenemos en la regulación del futbol, en el reglamento de competencia, es la figura de ‘grupo de animación’, pero solo se necesita revisar lo de ayer para ver que estamos ante un problema de criminales. Hay preguntas sobre por qué no hubo suficiente policía en la cancha y a partir de una variante a la normativa penal en varios estados, resulta que no se pueden tener efectivos en la cancha, eso falló y se debe hacer un análisis al respecto sobre qué hacer ante estos fenómenos delictivos», señaló el dirigente.
Con el daño hecho a la imagen del futbol mexicano, la pregunta es ¿Qué hacer para evitar otra tragedia? Lo que Arriola afirmó a Mediotiempo es que la tecnología debe ser preponderante para identificar a cada aficionado que ingrese a un estadio con su boleto y, de esa manera, cerrar toda escapatoria a los delincuentes que se hacen pasar por fanáticos del deporte.