Ciudad Victoria, Tam.; 6 de noviembre de 2022.
Utilizando microorganismos benéficos como tratadores de agua residual, Diana Laura Peraza Liñán, estudiante de doctorado de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT), diseñó un prototipo que busca reutilizar el vital líquido en elentorno doméstico.
El proyecto de Diana Laura Peraza, alumna de doctorado, obtuvo el primer
lugar en la Expo Ciencias Tamaulipas 2022.
Con la asesoría del Dr. Wilberth Alfredo Poot Poot, de la Facultad de Ingeniería y Ciencias (FIC), la joven universitaria desarrolla su proyecto, el cual recientemente obtuvo el primer lugar en la Expo Ciencias Tamaulipas 2022 organizada por el Consejo Tamaulipeco de Ciencia y Tecnología, el COTACYT.
En entrevista, la alumna del Doctorado en Ciencias, Sistemas Agropecuarios y Medio Ambiente que imparte la FIC, comentó que su investigación está encaminada a generar un sistema de captación de agua en los hogares —por ejemplo, la que se utiliza en la cocina—, y que después del tratamiento pueda reutilizarse en el riego de hortalizas, plantas ornamentales, entre otros usos.
“El prototipo es un biorreactor. Puede ser cualquier tipo de contenedor. Funciona a través de agitación. Se colecta el agua residual y se le añaden microorganismos benéficos del suelo para que trabajen y hagan su función”, explicó.
Dijo que este proceso permite que compuestos como materia orgánica, inorgánica o incluso aceites y grasas que se generan en las labores domésticas se trasformen, para que el agua pueda volver a usarse en otras tareas.
“La idea es que cualquier persona lo pueda replicar; que sean materiales de fácil acceso y que sea económica su construcción, que pueda tratar el agua quese usa en la casa y darle otra utilidad”, apuntó.
Su proyecto se denomina “Microorganismos benéficos tratadores de agua residual” y se desprende de una investigación del doctorado en el área de biorremediación utilizando microorganismos, como hongos y plantas, para degradar compuestos como el petróleo cuando hay un derrame en aguas.
A ese respecto, su asesor, el Dr. Wilberth Alfredo Poot Poot, refirió que la idea surge por el potencial que tienen algunos microorganismos para degradar materia orgánica, y que en este caso se utiliza una fuente de agua de origen doméstico.
“Se ha demostrado que hay microorganismos que pueden degradar varios tipos de compuestos, entre estos los aceites que se obtienen en las casas. Incluso el enfoque que ella tenía es degradar petróleo a través de microorganismos fúngicos”, asentó.
Puntualizó que el proyecto surge ante la necesidad de aprovechar al máximo el recurso hídrico, y en ese sentido se busca que el prototipo sea accesible para que todos puedan contar con un sistema de tratamiento de agua casero.