México puede volver a respirar con normalidad, la Copa Oro de nueva cuenta estará en sus vitrinas y todo gracias a una genialidad de Santiago Giménez, para la única anotación del juego; con eso derrotaron 1-0 a Panamá en Los Ángeles, ante más de 72 mil aficionados en el SoFi Stadium.
El delantero del Feyenoord salió de la banca para darle al Tricolor esa gloria que se le había escapado hace dos años; Santi hizo una jugada de otro partido, mostró porque está en el futbol de Europa y se lo empiezan a pelear clubes de mayor jerarquía.
La Selección Mexicana fue paciente, no se desesperó nunca ante los panameños se encerraron, ante un árbitro que hizo su show sacando amonestaciones por doquier y condicionando a los mexicanos desde el primer tiempo.
El Tricolor pegó primero en la primera mitad: Henry Martín adelantó a los verdes y cuando todos celebraban llegó el quitarrisas del VAR para anular por un fuera de juego del delantero yucateco.
Panamá fue tomando confianza al ver que el cerrojo impuesto no era descifrado por los mexicanos y se fueron aprovechando de la defensa condicionada, pero les faltó imaginación para hacerle daño al arco de Memo Ochoa.
El Jimmy Lozano, desde la banca, detectó que le faltaba punch en el ataque y fue entonces que metió a Santiago Giménez, quien con pocos minutos se entiendo a la perfección con Orbelín Pineda. El Maguito Pineda vio la audacia de Santi, le dio el balón con un pase largo y el del Feyenoord, con un solo movimiento, quedó completamente solo frente al arquero para cruzarlo, con dos defensas siguiéndolo a toda velocidad.
El SoFi Stadium estalló igual que toda la banca mexicana. El Tricolor de nueva cuenta es el mejor equipo de la Concacaf, ganó la Copa Oro, que es el torneo más importante del área, y si bien el verano empezó complicado con Diego Cocca al frente, Jaime Lozano recompuso el camino y le dio el título.
