Y… si me oyen

Costumbre que se ha hecho Ley

Juan Antonio Nava

Rolando ando: En las contiendas electorales alrededor del país como en el estado para definir nuestros representantes de elección popular, el ganador junto a los que lo acompañaron, piden la oportunidad de trabajar para beneficio del pueblo solo que al ocupar el puesto se olvidan de todos y de todo, ¿Y qué pasa?, que con el tiempo se ha vuelto costumbre que acomodan a su familia, a sus consanguíneos, a su concubina y hasta la “querida” en los espacios de mayor importancia.

Que con el tiempo y al paso de los años es una dinámica que ya tiende a pasar desapercibida, que lastima a una sociedad que ha perdido poco a poco la esperanza de que en ese renglón cambien o se quiten las cosas.

Que el puesto lo usan como una empresa familiar, no como una manera de hacer burocracia para que el beneficio aterrice a los ciudadanos.

No es propio de un solo lugar, sino usted póngase en el horizonte y dónde detenga su mirada, ahí hay esa situación.

Que como ciudadano común, pido o exijo que los diputados hagan una ley que prohíba estrictamente esta aberración, una ley con varios incisos que ponga las trabas para que esto no siga sucediendo, así como ambicionamos tener el México que todos queremos en esta Cuarta Transformación.

Los ganadores de un puesto de elección popular que trabajen al libre albedrio con una diversidad de personas que crean conveniente que son los mejores sin distinción de partido.

Los ganadores son escogidos en las urnas en el ánimo de gobernar para todos y con todos, no con unos cuantos, pues solo él fue el escogido, no su tribu ni su prole.

En el avión del poder

Rolando ando: pasados los cien días en la administración de Ciudad Victoria, hay avances significativos en muchos aspectos, indudablemente con otro panorama que es pintado de azul, con funcionarios de un CI y un alto nivel de preparación admirable, hay más cosas buenas que malas, hay primeros actores como actrices y sonados protagonistas en este renglón. Unos se la creen más de los debido, no se dan cuenta que lo primero que importa es el ciudadano.

El secretario del Ayuntamiento, el Licenciado José Luis Liceaga de León, es uno de los que subieron al avión del poder Municipal que se la creído tanto que ya sueña que pueda ser tomado en cuenta a candidato para una diputación local pues ha hecho cosas que se pone en el ojo del huracán, pero siempre sale bien librado: lo de haberle tomado la protesta al designado como el nuevo jefe del Tribunal Administrativo Municipal que al actual hasta el próximo mes se le cumplen sus días, solo dio en notar que le urge ponerlo con el motivo de no seguir escuchando quejas de la estructura municipal.

En eventos del alcalde dan celulares sus más allegados a las personas que se acercan con alguna petición para luego cometer la grosería de no contestarlo por orden del Secretario.

Paga con el erario municipal su estacionamiento privado al Licenciado Rafael Rodríguez Salazar, también se ha apropiado de las claves de trabajadores de confianza otorgándoselas a su gente solo con el miserable dicho de que pertenecían a otro partido, por eso fueron dados de baja y punto y dicen es admirable el trabajo de este funcionario que lleva pocos días, que ha engrandecido su orgullo su poder y se cree además tocado por la Divina Providencia.

Ya cuando tenga algunos años en el palacio del 17 pues se va a creer la mamá de Tarzán y va a querer bajar del caballo al Dr. Xico… Bueno digo.

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